Los consumidores británicos desconfían de los transgénicos, de la industria, de las autoridades

Un estudio encargado por el gobierno británico y publicado el pasado veinticuatro de septiembre muestra que los consumidores de aquel país no solo se sienten incómodos con los productos genéticamente modificados sino que desconfían tanto de las autoridades como de la industria alimentaria en este aspecto.

El estudio se encargó al Panel de debate sobre OGMs y agricultura biotecnológica y su objeto fue pulsar el estado de ánimo de la opinión pública sobre los OGMs. De él se extraen las siguientes conclusiones:

En primer lugar, que los consumidores desconfían de la biotecnología y son muy mayoritariamente contrarios a la comercialización de OGMs. Según la encuesta las actitudes varían de la duda y la preocupación al puro rechazo, siendo los partidarios de la biotecnología una pequeñísima minoría. La causa de este rechazo es la preocupación, que en muchos casos se expresa como certidumbre, por los daños que podrían causar en la salud y el medioambiente.

En segundo lugar, son los consumidores mejor informados sobre la biotecnología los que se oponen con más vehemencia a su utilización en la industria alimentaria. De acuerdo con esta tendencia, cuanto más conocimiento tiene un consumidor de la cuestión menos partidario es del uso de la...