Prólogo

AuthorLucía Millán Moro
Pages19-22

Page 19

El proceso de integración europea, como es bien sabido, comenzó por la integración económica, pero su objetivo último, expresamente mencionado en la Declaración de Robert Schuman de 1950, era la creación de una comunidad más amplia y más profunda entre los países europeos, es decir la unión política de Europa.

Es difícil incluir en una breve declaración tantas realidades referidas a Europa, tantas ideas claves necesarias para su unión, esbozar la creación de las Organizaciones Internacionales más avanzadas y originales que siguen existiendo en el mundo hasta hoy, y que la práctica y la evolución posterior hayan demostrado el gran acierto de la Declaración, hasta el punto, que cuando los avatares de la construcción europea parecía que hacían encallar el proceso de integración, la vuelta a los valores y las técnicas propuestas en la Declaración Schuman enderezaban y corregían la situación.

Pero además de la integración escalonada comenzando por los aspectos económicos, la Declaración vinculaba la unión de Europa con la paz. Esta vinculación ha demostrado su pertinencia en varios ámbitos. En el más evidente y fácil de comprobar, es que desde su creación en los años cincuenta con las Comunidades Europeas, hasta llegar a la Unión Europea en 2008, dentro de la Unión Europea no ha habido guerras, su ámbito interior ha sido un remanso de paz y prosperidad, tanto durante la etapa de la guerra fría como en la actualidad.

Esta afirmación es todavía más interesante si se vuelve la vista atrás y se comprueba la historia plagada de guerras y desencuentros en el continente europeo, no sólo hasta cinco años antes de la Declaración, sino que las guerras desgraciaPage 20damente han seguido existiendo hasta hace pocos años en el continente europeo, pero entre Estados que no eran miembros de la Unión Europea, y que lógicamente, quieren entrar a formar parte de ella, pues se ha revelado como un eficaz instrumento de paz entre sus Estados miembros.

La consecución de esa paz, sin embargo, sí que ha supuesto esfuerzos importantes por parte de los Estados miembros de las Comunidades Europeas primero y de la Unión Europea después. Los esfuerzos no han sido sólo en el ámbito económico, sino también, y muy importantes en el ámbito político. El firme compromiso de los Estados miembros fundadores con los principios democráticos, con el imperio de la ley y con el respeto de los derechos humanos, ha sido uno de los elementos fundamentales en el mantenimiento de...

To continue reading

Request your trial

VLEX uses login cookies to provide you with a better browsing experience. If you click on 'Accept' or continue browsing this site we consider that you accept our cookie policy. ACCEPT